Muchas personas han leído la Biblia y han visto el versículo que dice “donde estén dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. Mateo 18:20. Pero ¿sabemos realmente lo que significa? ¿Sabemos por qué Jesús dijo esto y cuál es su propósito para nosotros?
Qué significa Dónde hay dos o tres reunidos en mi nombre
«Dónde hay dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos» (Mateo 18:20).
Jesús dijo estas palabras para enfatizar la importancia de la iglesia como un cuerpo unido. Aunque él mismo es la cabeza de la iglesia, él habita en medio de los creyentes que están juntos. Él está allí cuando oramos, cuando estudiamos la Palabra y cuando nos reunimos para adorar.
Jesús tiene una presencia especial en la iglesia. Él no sólo está allí en espíritu, sino que también está allí de manera tangible. Podemos sentir su presencia cuando estamos juntos. Podemos orar a Jesús y él nos escucha. Podemos hablarle y él nos habla. También podemos ser testigos de su poder cuando vemos a otros siendo sanados, librados de demonios y recibiendo el Espíritu Santo.
La iglesia es el lugar donde podemos estar seguros de que Jesús está presente. No tenemos que buscar a Jesús en el cielo o en la tierra, porque él está aquí, en medio de su iglesia. Cuando estamos juntos, Jesús está con nosotros.
Cuál es el contexto de Mateo 18 20
El contexto de Mateo 18 20 es el siguiente: Jesús estaba enseñando a Sus discípulos acerca del perdón. En Mateo 18 20, Jesús enseña que debemos perdonar a los demás, aunque sean pecadores. Jesús dice que debemos ser misericordiosos como nuestro Padre es misericordioso. Jesús también enseña que debemos orar por nuestros enemigos. Finalmente, Jesús enseña que debemos amar a nuestros enemigos.
Jesús reafirma el poder y la importancia de la oración en esta breve pero poderosa declaración. Cuando dos o tres están reunidos en oración en Su Nombre, Él está presente y pueden orar efectivamente. Debemos buscar siempre la guía de Dios en nuestras vidas y orar con fe, sabiendo que Él está escuchando nuestras oraciones.