En este artículo exploraremos las enseñanzas y mensajes que Jesús transmitió a sus apóstoles durante su tiempo juntos. A lo largo de su ministerio, Jesús tuvo conversaciones significativas con sus discípulos, brindándoles sabiduría, instrucción y orientación para llevar a cabo su misión en la tierra.
Jesús compartió con sus apóstoles enseñanzas sobre el reino de Dios, la importancia del amor y el perdón, y la necesidad de llevar una vida de humildad y servicio. A través de parábolas, milagros y discursos, Jesús les mostró cómo vivir una vida centrada en Dios y en el amor hacia los demás.
Además, Jesús predijo su propia muerte y resurrección, y les explicó el propósito de su sacrificio. Les recordó que serían testigos de su obra y les encargó la tarea de difundir su mensaje por todo el mundo. También les prometió la presencia del Espíritu Santo, quien les guiaría y fortalecería en su labor.
En este artículo, profundizaremos en las palabras de Jesús a sus apóstoles y reflexionaremos sobre su relevancia para nosotros hoy en día. Descubriremos cómo sus enseñanzas pueden influir en nuestra fe, nuestras relaciones y nuestro propósito en la vida.
Jesús revela mensaje a apóstoles tras resurrección
En el artículo «Qué le dijo Jesús a sus apóstoles?», se aborda el momento en el que Jesús se apareció a sus apóstoles después de su resurrección. Durante este encuentro, Jesús reveló un mensaje fundamental que debía ser transmitido al mundo.
El encuentro tras la resurrección
Después de tres días de su crucifixión y muerte, Jesús se presentó a sus apóstoles, quienes se encontraban en un estado de asombro y confusión. Su resurrección era un evento sin precedentes y marcaba el cumplimiento de las profecías antiguas.
En este encuentro, Jesús les mostró las heridas de sus manos y costado, evidencia tangible de su sacrificio por la humanidad. Este acto simbolizaba la victoria sobre el pecado y la muerte, y confirmaba su divinidad y poder sobre todas las cosas.
El mensaje revelado
En ese momento trascendental, Jesús compartió con sus apóstoles un mensaje clave para la misión que les encomendó. Les recordó su llamado a predicar el evangelio y a difundir las enseñanzas de amor y redención a todas las naciones.
El mensaje se centraba en la importancia de la fe en Jesús como el Hijo de Dios y Salvador. Les instó a que compartieran este mensaje con valentía y perseverancia, sin temer las dificultades y persecuciones que enfrentarían.
El poder del Espíritu Santo
Además, Jesús les prometió el envío del Espíritu Santo para fortalecerlos en su misión. Esta promesa les otorgaba la capacidad de ser testigos vivos de la resurrección y de llevar a cabo milagros en su nombre.
La Gran Comisión
Finalmente, Jesús les encomendó la Gran Comisión, que consistía en ir por todo el mundo y hacer discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Les recordó que él estaría con ellos siempre, hasta el fin de los tiempos.
Implicaciones para hoy
Este mensaje revelado por Jesús a sus apóstoles sigue siendo relevante en la actualidad.
Nos invita a seguir compartiendo el evangelio y a vivir una vida basada en la fe en Jesús. También nos recuerda que contamos con el poder del Espíritu Santo para llevar a cabo la misión que nos ha sido encomendada.
Promesa de Jesús a sus discípulos
En el artículo de hoy, vamos a profundizar en la promesa de Jesús a sus discípulos. Jesús, como líder espiritual y maestro, tenía un mensaje importante para transmitir a sus seguidores más cercanos.
1. La promesa de la presencia divina: Jesús les aseguró a sus apóstoles que no los dejaría solos. En Juan 14:18, Jesús dijo: «No los dejaré huérfanos; vendré a ustedes». Esta promesa de Jesús es reconfortante, ya que implica que Dios estaría presente en la vida de sus seguidores incluso después de su partida física.
2. La promesa del Espíritu Santo: Jesús también prometió enviar al Espíritu Santo para guiar y fortalecer a sus discípulos. En Juan 14:16-17, Jesús dijo: «Y yo le pediré al Padre, y él les dará otro Consolador para que esté siempre con ustedes. Este Consolador es el Espíritu de verdad, al que el mundo no puede recibir porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque vive con ustedes y estará en ustedes». Esta promesa del Espíritu Santo es una señal de la presencia continua de Dios en la vida de sus seguidores.
3. La promesa de la paz: Jesús les dio a sus discípulos la promesa de la paz en medio de las dificultades. En Juan 16:33, Jesús dijo: «Les he dicho estas cosas para que en mí encuentren paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo». Esta promesa de paz es una fuente de consuelo y esperanza para los seguidores de Jesús, ya que implica que incluso en tiempos de tribulación, pueden encontrar tranquilidad en su fe en Dios.
En resumen, Jesús dejó un legado de amor, enseñanza y ejemplo para sus apóstoles y para todos nosotros. Les recordó la importancia de amar a Dios y al prójimo, les encomendó la tarea de difundir su mensaje de salvación y les prometió su presencia eterna a través del Espíritu Santo. Sus palabras continúan siendo relevantes y transformadoras hoy en día, invitándonos a seguir sus enseñanzas y a vivir de acuerdo con su amor y gracia. Que podamos ser fieles discípulos de Jesús, llevando su mensaje de esperanza y redención a todas las personas que nos rodean. ¡Que la paz y la gracia de nuestro Señor Jesucristo estén siempre con ustedes!