El libro del Apocalipsis nos habla de muchos eventos que sucederán en los últimos días, pero ¿qué podemos aprender de él hoy? Aunque parezca que muchos de los eventos descritos en el libro todavía no han ocurrido, podemos ver que los dos testigos del Apocalipsis ya están aquí. Estos dos testigos son profetas que Dios ha enviado a este mundo para advertir a la gente de los eventos que vendrán. Si leemos el libro de forma correcta, podremos aprender mucho de ellos y estar preparados para lo que está por venir.
Qué pasa con los dos testigos del Apocalipsis
Los dos testigos del Apocalipsis son una figura importante en el libro del Apocalipsis. Aparecen en el capítulo 11, versículos 3-12. Son mencionados como «los testigos», «los profetas» o «los dos olivos».
Los dos testigos son profetas que tienen el poder de hacer milagros, como el de convertir el agua en sangre y de causar plagas. Predicarán durante 1.260 días, hasta que un ser maligno llamado «el monstruo que sube del abismo» los matará. Sin embargo, los dos testigos resucitarán y subirán al cielo en una nube, dejando a sus enemigos atónitos.
El capítulo 11 no dice quiénes son los dos testigos, pero hay muchas especulaciones. Algunos creen que son Moisés y Elias, ya que aparecieron con Jesús en el Monte de la Transfiguración (Mateo 17:3). Otras posibles identidades incluyen a los apóstoles Pedro y Pablo, o a los profetas Juan el Bautista y Juan el Evangelista.
Sea cual sea su identidad, los dos testigos del Apocalipsis simbolizan la fidelidad de Dios y la resistencia a las fuerzas del mal. Su muerte y resurrección señalan que, aunque el mal pueda triunfar por un tiempo, Dios siempre tendrá la última palabra.
Cuáles son los testigos según la Biblia
La Biblia nos dice que hay dos tipos de testigos: testigos oculares y testigos de oídas.
Testigos oculares: Los testigos oculares son aquellos que han visto algo con sus propios ojos. En la mayoría de los casos, son testigos presenciales de un evento. En Juan 1:14, el apóstol Juan dice que él fue testigo ocular de la gloria de Cristo.
Testigos de oídas: Los testigos de oídas son aquellos que no han visto algo con sus propios ojos, pero han oído hablar de ello de una fuente confiable. En la mayoría de los casos, los testigos de oídas son testigos de segunda mano. Sin embargo, esto no significa que sus testimonios sean menos válidos. En Hechos 10:39-41, Pedro dice que él fue testigo de oídas de la resurrección de Cristo.
En resumen, los testigos oculares son aquellos que han visto algo con sus propios ojos, mientras que los testigos de oídas son aquellos que han oído hablar de algo de una fuente confiable. En ambos casos, los testimonios son válidos.
Qué dice la Biblia en Apocalipsis 11 1
En el libro del Apocalipsis, capitulo 11, versiculo 1, se lee:
«Entonces me dio una caña semejante a una vara, y me dijo: ‘Levántate y mide el templo de Dios y el altar, y a los que adoran allí. ‘»
Este versículo se encuentra en el contexto de la segunda venida de Cristo, cuando él establecerá su reino eterno. En este versículo, Dios le dice a Juan que medir el templo de Dios y el altar, y aquellos que adoran allí. Esto significa que Dios tiene un plan específico para aquellos que adoran en su templo, y que él los ha medido y encontrado aceptables.
Desde el comienzo de la Creación, Dios ha establecido a dos testigos para estar presentes en todos los eventos importantes. En el libro del Apocalipsis, se nos dice que estos dos testigos son Enoc y Elias. Enoc fue el primer hombre en ser arrebatado vivo al cielo, y Elias fue el profeta que nunca murió. Ambos testigos están presentes en el mundo actual, y están aquí para testificar del fin de los tiempos.