En Mateo 6:3, Jesús dice: «Pero cuando hagas limosna, no hagas todo ruido al darla, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para que se les honre por los hombres. De verdad les digo que ya tienen su recompensa». Jesús enseña aquí que debemos ser discretos al dar, y no hacer alarde de nuestras buenas obras. Sin embargo, muchas veces nos encontramos en situaciones en las que no podemos evitar hacer ruido al dar. ¿Está bien hacer ruido cuando damos limosna?
Qué significa que tu mano derecha no sepa lo que hace tu mano izquierda
Mateo 6:3 – Cuando hagas una obra de misericordia, no lo anuncies con trompeta, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para que los hombres los alaben. De cierto les digo que ya han recibido su recompensa.
En esta versión, Jesús les está diciendo a sus seguidores que no deben anunciar a los demás cuando hayan hecho una obra de misericordia. En otras palabras, deben ser humildes en sus acciones de bondad. Jesús continúa diciendo que los hipócritas ya han recibido su recompensa, porque han recibido elogios de los demás.
Entonces, ¿qué significa esto para nosotros? Jesús está diciendo que debemos ser humildes en nuestras acciones de bondad. No debemos buscar la recompensa de los demás, sino la recompensa de Dios. Debemos hacer el bien porque es la voluntad de Dios, no porque esperamos algo a cambio.
Qué quiere decir Mateo 6 3
En el Evangelio de Mateo, Jesús enseña a sus seguidores que deben orar a Dios en secreto, no como los fariseos, que oraban en público para que otros los vieran. Jesús dice que cuando oramos, debemos entrar en nuestra habitación, cerrar la puerta y orar a nuestro Padre en secreto. Dios nos escucha y nos da lo que necesitamos, no importa si oramos en público o en privado.
Qué dice la Biblia sobre la mano derecha
En muchas ocasiones, la mano derecha se usa como símbolo del poder y la autoridad. En la Biblia, la mano derecha está asociada con el poder de Dios y con la salvación. En la mayoría de las referencias bíblicas, la mano derecha representa la protección, la fuerza y la bendición de Dios.
Por ejemplo, en Salmo 16:8, David declara: «Protección y fuerza están en su mano derecha». Deuteronomio 33:2 dice: «Desde Sinaí vino, de la parte de Dios, y los escogió de entre todo el pueblo. A su derecha está el Señor». En Salmos 139:5, el salmista exclama: «Tú me formaste en el seno materno». Y en Mateo 6:33, Jesús enseña a buscar primero el reino de Dios. En todas estas referencias, la mano derecha de Dios se presenta como un lugar de protección, fuerza y bendición.
La mano derecha de Dios es un lugar de protección especial para aquellos que confían en él. En Salmo 18:35, David exclama: «Me ha librado de todos mis enemigos, y me ha exaltado sobre los que me atacan». Y en Salmo 31:5, dice: «Me has rodeado de protección y de salvación». La mano derecha de Dios es un lugar de refugio seguro para aquellos que confían en él.
La mano derecha de Dios también es un lugar de fuerza y poder. En Salmo 89:13, el salmista declara: «Tú eres exaltado para siempre, Señor; tu poder está en acción». Y en Salmo 118:16, dice: «La fuerza y el poder están en tu mano derecha». La mano derecha de Dios es un lugar de fuerza y poder para aquellos que confían en él.
La mano derecha de Dios es un lugar de bendición para aquellos que confían en él. En Salmo 20:6, dice: «Al son de trompetas te pedimos ayuda, y en tu mano derecha están nuestras victorias». Y en Salmo 21:3, el rey David declara: «Tú me bendices con tu mano derecha». La mano derecha de Dios es un lugar de bendición para aquellos que confían en él.
En resumen, la Biblia enseña que la mano derecha de Dios es un lugar de protección, fuerza y bendición para aquellos que confían en él. Es un lugar seguro donde podemos encontrar refugio, y un lugar de poder y victoria. Si confiamos en Dios, podemos estar seguros de que él nos bendecirá.
¿Que tú diestra no sepa lo que hace tu siniestra?
Jesús dijo: «Tú, por tu parte, cuando hagas una limosna, no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha, para que tu limosna quede en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará»(Mateo 6:3-4).
La mano izquierda representa el lado oculto de nuestra naturaleza, aquello de lo que no somos conscientes. Jesús nos enseña que debemos hacer el bien de forma natural, sin buscar la recompensa o el reconocimiento. Debemos ser humildes y dejar que nuestras buenas acciones hablen por sí mismas.
Cuando hacemos el bien de forma sincera y desinteresada, nuestro Padre celestial nos recompensará de forma abundante. Debemos tener fe y confiar en que él sabe lo que necesitamos, y que nos dará todo lo que necesitemos para vivir una vida plena y feliz.
La Biblia nos enseña que debemos hacer el bien sin esperar nada a cambio. Debemos ser generosos y dar de nuestro tiempo y talents sin esperar nada a cambio. Dios nos bendecirá si somos fieles a este mandamiento y nos dará su favor.