Que Dice Jesús de Si Mismo

Jesús de Nazaret es uno de los figuras más importantes de la historia. Su impacto en la humanidad es inestimable. Pero, ¿qué dijo Jesús de sí mismo? A lo largo de su ministerio, Jesús hizo muchas declaraciones audaces sobre su identidad. En esta serie de artículos, exploraremos algunas de las cosas que Jesús dijo de sí mismo.

Quién dice Jesús que es el mismo

Jesús le dice a sus discípulos: «Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie viene al Padre excepto por medio de mí» (Juan 14:6).

Jesús fue claro en esta declaración: Él es el único camino a Dios el Padre. Jesús es la única forma de llegar a Dios. Nadie puede ir directamente a Dios el Padre, sino solo a través de Jesús.

Desde el principio de la Biblia, Dios ha establecido un plan de salvación a través de un Mediador. En la Antiguo Testamento, Dios escogió a Moisés como el mediador entre Dios y el pueblo de Israel. Dios le dio a Moisés las tablas de la ley, y Moisés fue el que transmitió la ley al pueblo.

Al darse cuenta de que el pueblo de Israel no podía obedecer sus propias leyes, Dios envió a Jesús, el Mediador perfecto, para hacer la obra de salvación. Jesús vino al mundo y vivió una vida perfecta, obedeciendo todos los mandamientos de Dios. Luego, Jesús murió en la cruz, tomando el castigo que nosotros merecíamos, para que podamos tener vida eterna.

Jesús es el único Mediador entre Dios y los hombres, y solo a través de él podemos tener vida eterna.

Qué dice Jesús de sí mismo en la cita bíblica

Jesús les dijo: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” Juan 14:6

En esta cita bíblica, Jesús se presenta a sí mismo como el camino, la verdad y la vida. Esto significa que él es el único medio por el cual las personas pueden llegar al Padre. Jesús es el único que puede ofrecer la vida eterna a los seres humanos.

Que otras cosas recordamos que Jesús dijo de sí mismo

Jesús dijo muchas cosas acerca de sí mismo, y aunque no podemos mencionar todas las cosas que dijo, vamos a ver algunas de las más importantes.

Jesús es el Hijo de Dios

«Porque Dios amó al mundo tanto, que me dio a mí, el Hijo único, para que todo el que cree en mí no muera, sino que tenga vida eterna.» (Juan 3:16)

Jesús es nuestro Salvador

«Porque Dios envió a su Hijo al mundo, no para juzgar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.» (Juan 3:17)

Jesús es la Luz del mundo

«Yo soy la luz del mundo. El que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.» (Juan 8:12)

Jesús es el Pan de Vida

«Yo soy el pan de vida. El que viene a mí, no tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.» (Juan 6:35)

Jesús es el Camino, la Verdad y la Vida

«Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.» (Juan 14:6)

Jesús es el Buen Pastor

«Yo soy el buen pastor. El buen pastor su vida echa por las ovejas.» (Juan 10:11)

Jesús es la Resurrección y la Vida

«Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá.» (Juan 11:25)

Jesús es la Puerta

«Yo soy la puerta. Si alguno entra por mí, será salvo, y entrará y saldrá, y hallará pastos.» (Juan 10:9)

¿Qué dijo Jesús de la vida?

Jesús habló mucho acerca de la vida. En Mateo 5:3-10, Jesús dice que los pobres en espíritu son los bienaventurados, y que los que lloran son los bienaventurados. En Mateo 5:21-26, Jesús habla acerca de no ser adicto al pecado, y en Mateo 5:27-30, Jesús enseña que no debemos tener relaciones sexuales fuera del matrimonio.

En Mateo 6:25-34, Jesús dice que no debemos preocuparnos por nuestra vida, sino buscar primero el reino de Dios y su justicia. En Mateo 7:1-5, Jesús enseña que no debemos juzgar a los demás, y en Mateo 7:13-14, Jesús habla acerca de la importancia de entrar por la puerta estrecha.

En Mateo 10:37-39, Jesús enseña que debemos amar a nuestra familia, y en Mateo 16:24-26, Jesús dice que debemos seguirlo, y que debemos tomar nuestra cruz. En Mateo 19:16-30, Jesús habla de los ricos, y dice que es difícil para ellos entrar en el reino de los cielos.

En Mateo 22:34-40, Jesús enseña que el primer mandamiento es amar a Dios con todo nuestro corazón, mente y alma, y el segundo mandamiento es amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. En Mateo 25:1-13, Jesús enseña acerca de la parábola de las diez vírgenes, y en Mateo 25:14-30, Jesús enseña acerca de la parábola de los talentos.

En Mateo 25:31-46, Jesús habla acerca de la separación de las ovejas y las cabras, y enseña que los que hayan hecho las obras de misericordia irán al reino de los cielos, pero los que no hayan hecho las obras de misericordia irán al fuego eterno.

Jesús dice que él es el Hijo de Dios y que el Padre le ha enviado al mundo para salvación. Jesús también dice que él es el Camino, la Verdad y la Vida. Así, Jesús se presenta a sí mismo como la única manera de llegar a Dios.

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