En el libro de Filipenses, Pablo escribe que toda rodilla debe doblarse «en el nombre de Jesucristo». Esto significa que debemos reconocer que Jesús es el Señor, y que toda nuestra vida debe estar dedicada a seguirlo. Esto es especialmente importante cuando estamos enfrentando dificultades o problemas. Debemos orar en el nombre de Jesús, y buscar su guía y ayuda. Él es el único que puede dar la paz y la fuerza que necesitamos para superar cualquier situación.
Que al nombre de Jesús toda rodilla
Jesús es el único mediador entre Dios y los hombres (1 Timoteo 2:5). Como tal, es el único que puede interceder por nosotros ante el Padre. Jesús es también el único que puede perdonar nuestros pecados (Marcos 2:5-12). Y es el único que puede dar la vida eterna (Juan 3:16).
Por estas razones, toda rodilla deberá doblarse ante el nombre de Jesús, y toda lengua confesará que Jesús es el Señor, para gloria de Dios Padre (Filipenses 2:10-11).
Qué quiere decir Filipenses 2 4
La primera parte de Filipenses 2: 4 dice: «No miréis a cada uno solamente a lo suyo propio, sino también a lo de los otros». Esto significa que debemos tener consideración y preocupación genuinas no solo por nosotros mismos, sino también por los demás. Debemos mirar más allá de nuestras propias necesidades y deseos, y pensar en cómo podemos servir y ayudar a los demás. Esto es algo que debemos hacer de forma consciente y deliberada, y no solo cuando es conveniente para nosotros. Debemos estar dispuestos a sacrificar nuestro propio tiempo, esfuerzo y bienestar si es necesario para ayudar a otros.
La segunda parte de Filipenses 2: 4 dice: «Porque todos tenemos un mismo Espíritu, de modo que todos somos hermanos». Esto nos recuerda que todos somos seres humanos iguales, y que todos tenemos el mismo Espíritu de Dios que habita en nosotros. Debemos tratar a los demás con el mismo amor, respeto y consideración que queremos para nosotros mismos. Debemos darnos cuenta de que todos estamos conectados, y que lo que hacemos o dejamos de hacer, tiene un impacto en todos los demás. Debemos vivir en armonía y en unidad, y no permitir que nada ni nadie nos divida.
Qué dice en Romanos 14 11
En Romanos 14: 11, Pablo habla de la resurrección, y dice que todos los vivimos y morimos en Cristo. Esto significa que, si somos cristianos, participamos de la muerte de Cristo en un sentido espiritual, y también de su resurrección. Por lo tanto, somos unidos a él en su muerte y en su vida. Pablo también dice en esta pasaje que todos nosotros nos presentaremos ante el tribunal de Cristo, y que él juzgará a todos los seres humanos de acuerdo con lo que hayan hecho mientras vivían. Todos los que hayan vivido en Cristo serán juzgados por él, y aquellos que no hayan vivido en Cristo serán juzgados por Dios. Pablo también dice que todos los que hayan vivido en Cristo serán salvados, mientras que aquellos que no hayan vivido en Cristo serán condenados.
¿Donde dice la Biblia de dos en dos?
Dos testigos – «Si alguna cosa ha de ser confirmada por el testimonio de dos o tres testigos, toda causa será establecida por el testimonio de dos o tres testigos» (Deuteronomio 19:15).
La Biblia dice que necesitamos el testimonio de dos o tres testigos para confirmar algo. Esto es importante porque nos ayuda a tener certeza de lo que estamos confirmando. Es mejor tener más de un testimonio para asegurarnos de que estamos en lo correcto.
Dos testigos son mejor que uno – «Porque si hablan dos testigos, el asunto está confirmado» (Proverbios 14:25a).
La Biblia también dice que dos testigos son mejor que uno. Esto es porque el segundo testimonio puede confirmar lo que el primero ha dicho. Tener más de un testimonio nos ayuda a estar seguros de que lo que estamos oyendo es verdad.
La mayoría de las cosas requieren el testimonio de dos testigos – «Porque el reino de los cielos se parece a un hombre que fue a un país lejano para comprar un campo, y después de comprarlo, volvió a su casa. Llamó a dos de sus siervos y les entregó a cada uno cinco talentos. A uno le dio dos talentos, y al otro le dio tres talentos. Luego se fue lejos» (Mateo 25:14-15).
La mayoría de las cosas requieren el testimonio de dos testigos. Esto es importante porque nos ayuda a estar seguros de lo que estamos confirmando. Es mejor tener más de un testimonio para asegurarnos de que estamos en lo correcto.
Para honor y gloria de Dios, todos debemos doblar nuestras rodillas ante Jesucristo, quien es Señor de todo.