La Biblia es clara en cuanto a que hay un lugar llamado cielo, pero ¿qué hay de los animales? ¿Van los animales al cielo cuando mueren? Esta es una pregunta que muchas personas se hacen, y la Biblia tiene mucho que decir al respecto.
Qué dice la Biblia de los animales van al cielo
La Biblia no dice explícitamente si los animales van al cielo, pero hay algunos pasajes que indican que sí. En la historia de Noé, Dios promete que nunca más destruirá a toda la vida en la tierra por el agua, y que enviará un arco iris como señal de su pacto. Esto sugiere que Dios tiene un propósito especial para los animales, y que son parte de su creación.
Otros pasajes, como el de Isaías 11:6-9, indican que en el reino de Dios, los animales vivirán en paz y armonía. En este pasaje se describe un mundo en el que los leones se alimentarán de hierba junto con los asnos, y los niños jugarán con los cobras. Esto parece indicar que los animales serán parte de la nueva creación de Dios.
Finalmente, en el libro de Apocalipsis se describe un cielo nuevo y una tierra nueva, en los que Dios habitará con todos sus seres queridos. Este pasaje indica que todos los seres vivos, incluidos los animales, estarán en el cielo.
En resumen, aunque la Biblia no lo dice explícitamente, hay pasajes que indican que los animales van al cielo. Esto es una buena noticia para todos los amantes de los animales, ya que significa que podremos reunimos con nuestras mascotas un día.
Dónde van las almas de los animales cuando mueren
La Biblia no dice mucho sobre el destino final de los animales, pero algunos versículos nos dan pistas sobre lo que podría ser. Algunos creen que las almas de los animales van al cielo, pero la Biblia no lo confirma de manera explícita. Sin embargo, hay algunas referencias indirectas que sugieren que es posible.
En el libro de los Hechos, el apóstol Pedro predica a Cornelio y su familia. En esta ocasión, Cornelio tiene una visión en la que ve unos cuantos animales en el cielo. Esto sugiere que los animales tienen un lugar en el cielo, aunque no está claro si se trata de sus almas o de sus cuerpos.
Otro versículo que podría dar pistas sobre el destino final de los animales es en Apocalipsis 5:13, donde se dice: «Entonces oí que decían a gran voz: «¡Alabado sea el Señor, el Dios Todopoderoso, que reina para siempre! Amén». Y oí que los seres vivientes decían: «¡Alabanza, gloria, sabiduría y acción de gracias, honor, poder y fuerza al Señor nuestro Dios!»»
En este versículo, se menciona a los seres vivientes, que en este contexto se refieren a los animales, alabando a Dios. Esto sugiere que los animales tienen algún tipo de conciencia después de la muerte, y que están en un lugar donde pueden ver y alabar a Dios.
En conclusión, la Biblia no nos da una respuesta clara y concisa sobre el destino final de los animales. Pero, a partir de algunos versículos, podemos inferir que las almas de los animales van al cielo, donde tienen un lugar especial junto a Dios.
Qué dice Jesús de los animales
Jesús fue muy claro en su enseñanza acerca de los animales. En Mateo 10:29-31, dijo: «¿No se venden dos pájaros por un centavo? Sin embargo, ni uno de ellos caerá a tierra sin el consentimiento de mi Padre. Y toda persona tiene en su mano el precio de su vida. ¿Por qué, entonces, se preocupan tanto por la ropa? Miren los lirios del campo, cómo crecen. No trabajan ni hilan. Pero les digo que ni aun Salomón, en toda su magnificencia, se vistió como uno de ellos. Si Dios cuida tanto de las flores que hoy están en el campo y mañana son arrojadas al horno, ¿no hará mucho más por ustedes, hombres de poca fe?» Mateo 6:26 también dice: «Miren los pájaros del cielo, no siembran ni cosechan, ni recogen en graneros; sin embargo, su Padre celestial les da de comer. ¿No valen ustedes mucho más que ellos?»
En estos versículos, Jesús está enseñando que Dios ama a todos sus criaturas, y que él se preocupa por cada una de ellas. Él está diciendo que si Dios se preocupa tanto por los animales, entonces deberíamos confiar en él para cuidar de nosotros. Esto es una gran enseñanza para todos nosotros, ya que nos muestra que debemos amar y cuidar a todos los animales, ya que son un regalo de Dios.
¿Qué pasa cuando los perros van al cielo?
Según la Biblia, los animales no tienen un alma, por lo que no pueden ir al cielo. Sin embargo, hay una historia en la Biblia en la que un perro es mencionado como si fuera una persona. En el libro de los Hechos, capítulo 10, versículo 3, se relata la historia de Cornelio, un centurión romano. Cornelio era un hombre piadoso que hacía muchas limosnas y oraba constantemente. Un día, Cornelio tuvo una visión en la que un ángel le dijo que orara porque sus oraciones habían sido oídas. El ángel también le dijo que enviaría a alguien a él para que le enseñara lo que debía hacer. Cornelio llamó a dos de sus siervos y a un soldado piadoso, y les dijo que esperaran mientras él oraba. Mientras Cornelio oraba, tuvo otra visión en la que vio al mismo ángel que le había hablado antes. El ángel le dijo que sus oraciones habían sido escuchadas y que él y toda su familia serían bendecidos. El ángel le dijo que enviaría a alguien para que le enseñara lo que debía hacer. Cornelio llamó entonces a un hombre llamado Pedro, quien le enseñó acerca de Jesús y lo guió para que él y toda su familia se convirtieran en creyentes. Cornelio también era un hombre de fe, y cuando Pedro le enseñó acerca de Jesús, él creyó. Cornelio era un hombre justo y piadoso, y la Biblia dice que él fue declarado justo por su fe. Cornelio también fue el primer gentil en convertirse al cristianismo.
La historia de Cornelio es interesante porque él era un perro. Según la Biblia, los perros no tienen un alma, pero Cornelio fue tratado como si fuera una persona. Esto nos muestra que Dios puede usar a cualquiera para llevar a cabo Sus propósitos. No importa qué tan pequeño o insignificante puedas parecer, Dios puede usarte de grandes maneras.
La Biblia no dice mucho sobre el destino final de los animales, pero algunos versículos sugieren que los animales no irán al cielo. En Mateo 6:26, Jesús dice que los animales no tienen alma, por lo que no pueden ir al cielo. En el libro de Revelación, los animales están presentes en el cielo, pero no se menciona nada sobre si ellos también irán allí cuando mueran. Por lo tanto, debemos dejar esta pregunta en manos de Dios y esperar con ansias el día en que todas las cosas sean reveladas.
julio 27, 2023
Mi perrito Cornelio 🙁