En la sociedad actual, existen diversas interpretaciones sobre la obligatoriedad del diezmo en la Biblia. Algunos consideran que es un mandato divino, mientras que otros lo ven como una práctica opcional. Sin embargo, es importante analizar detenidamente las escrituras para comprender dónde se menciona la obligatoriedad del diezmo en la Biblia.
Obligatoriedad del diezmo: una creencia arraigada
El diezmo es una práctica religiosa que ha sido ampliamente debatida y discutida a lo largo de los años. Muchas personas se preguntan si realmente es obligatorio según la Biblia. En este artículo, exploraremos algunos pasajes bíblicos que respaldan la obligatoriedad del diezmo desde un punto de vista religioso.
1. Malaquías 3:10
Uno de los pasajes más citados en relación con el diezmo es Malaquías 3:10, donde Dios dice: «Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde». Este versículo muestra claramente la obligatoriedad del diezmo, ya que Dios mismo lo ordena y promete bendiciones a quienes lo cumplan.
2. Levítico 27:30
Otro pasaje relevante es Levítico 27:30, donde se establece claramente que «todo diezmo de la tierra, así de la simiente de la tierra como del fruto de los árboles, de Jehová es; es cosa dedicada a Jehová». Aquí se enfatiza que el diezmo pertenece a Dios y debe ser entregado como una ofrenda sagrada.
3. Hebreos 7:8
En Hebreos 7:8, se menciona a Abraham como el precursor del diezmo, cuando dice: «Y aquí ciertamente reciben los diezmos hombres mortales; pero allí, uno de quien se da testimonio de que vive». Este pasaje muestra que el diezmo ha sido practicado desde tiempos antiguos y continúa siendo relevante en la vida de los creyentes.
4. Lucas 11:42
En Lucas 11:42, Jesús critica a los fariseos por su falta de generosidad y menciona el diezmo como una práctica que no deben descuidar: «¡Ay de vosotros, fariseos! porque diezmáis la menta, y la ruda, y toda hortaliza, y pasáis por alto la justicia y el amor de Dios. Esto os era necesario hacer, sin dejar aquello». Aquí, Jesús deja claro que el diezmo es una obligación para los creyentes, pero no debe ser lo único en lo que se enfoquen.
5. Mateo 23:23
En Mateo 23:23, Jesús nuevamente menciona el diezmo al reprender a los escribas y fariseos: «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello». Aquí, Jesús enfatiza que el diezmo es importante, pero no debe ser lo único en lo que se centren los creyentes.
Jesús enseña sobre el diezmo
El diezmo es un tema importante en la enseñanza de Jesús. Aunque no se menciona específicamente en las palabras de Jesús, podemos encontrar principios y enseñanzas relacionadas con el diezmo en varios pasajes de la Biblia.
1. Mateo 23:23
En este pasaje, Jesús critica a los fariseos por su hipocresía y les dice: «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello» (Mateo 23:23, RVR1960).
En esta frase, Jesús reconoce la práctica del diezmo por parte de los fariseos, pero también les recuerda que no deben descuidar los aspectos más importantes de la ley, como la justicia, la misericordia y la fe. Jesús enfatiza que el diezmo no debe ser practicado de manera mecánica, sino en el contexto de una vida justa y misericordiosa.
2. Lucas 11:42
Otro pasaje relacionado con el diezmo se encuentra en Lucas 11:42, donde Jesús dice: «¡Pero ay de vosotros, fariseos! porque diezmáis la menta, la ruda y toda hortaliza, y pasáis por alto la justicia y el amor de Dios. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello» (Lucas 11:42, RVR1960).
En esta ocasión, Jesús nuevamente critica a los fariseos por su enfoque en el diezmo de las plantas, pero su falta de atención a la justicia y al amor de Dios. Jesús les recuerda que el diezmo no debe ser la única preocupación, sino que debe ir acompañado de una vida justa y de amor hacia Dios y hacia los demás.
3. Marcos 12:41-44
En este pasaje, Jesús observa a los ricos que depositan grandes sumas de dinero en el tesoro del templo, pero también nota a una viuda pobre que deposita dos pequeñas monedas. Jesús elogia a la viuda, diciendo: «De cierto os digo que esta viuda pobre ha echado más que todos los que han echado en el arca; porque todos han echado de lo que les sobra; pero ésta, de su pobreza, echó todo lo que tenía, todo su sustento» (Marcos 12:43-44, RVR1960).
En este caso, Jesús destaca la actitud generosa y sacrificial de la viuda, quien dio todo lo que tenía, a pesar de su pobreza. Aunque no se menciona específicamente el diezmo, este pasaje muestra la importancia de dar de manera generosa y sincera, no solo en términos de dinero, sino también de tiempo, talentos y recursos.
En conclusión, no hay un pasaje específico en la Biblia que diga explícitamente que el diezmo es obligatorio para los creyentes en la actualidad. Si bien el diezmo se menciona en el Antiguo Testamento como una práctica común en el pueblo de Israel, en el Nuevo Testamento no se enfatiza su obligatoriedad. En su lugar, se nos anima a dar generosamente según nuestras posibilidades y alegremente, sin estar limitados a un porcentaje fijo. Sin embargo, la decisión de si dar el diezmo o no, debe ser personal y consensuada con la guía del Espíritu Santo. Lo más importante es recordar que Dios ama un corazón generoso y dispuesto a dar para bendición de los demás y para Su reino. Que podamos buscar siempre la voluntad de Dios en todas nuestras decisiones financieras y recordar que el dar no debe ser una obligación sino una expresión de nuestro amor y gratitud hacia Él. ¡Que Dios les bendiga ricamente en todas sus áreas de vida!